4. Componente principal. Instalación y pruebas varias
Instalar y probar esta semitorre no será una tarea difícil, ya que viene todo ya medio hecho. Con un poco de paciencia con el destornillador y pasando algún que otro cable para esconderlo todo quedará perfecto. Pero antes de entrar en detalles de montaje, hace falta comentar unas cuantas cosas para conocer mejor la Obsidian 500D RGB SE.
Para empezar, este modelo rompe la monotonía de «todo acero» combinando 3 materiales principales a la perfección. Esto influye directamente en la estética y está resuelto con maestría. El lomo, que es la parte más «fea» de cualquier caja, en este caso está perfectamente fabricado de aluminio cepillado microperforado, evitando de paso que sea plano, y dicho sea de paso con cortes perfectos en todo su perímetro. Esto aumenta la elegancia de la semitorre y cubre la cara vista que sería de acero, puesto que la frontal y laterales son de vidrio templado.
Pero una vez más, el panel de conexiones y control está arriba de la zona delantera, aunque bien distribuido, destacando el conector USB Tipo C y la diferenciación clara del botón de encendido y el de reinicio. Muchos fabricantes tienen la manía de colocar este panel ahí en la superficie superior, cuando siempre es mejor en la superficie frontal. Parece una de esas modas difícil de combatir, pero convierten a este diseño en algo un tanto ilógico, hecho más para facilitar su construcción que velando por la comodidad del usaario. Nos preguntamos hasta qué punto los fabricantes o ingenieros de este tipo de cajas se plantean los problemas derivados de colocar esas conexiones y al acceso de ellas ahí arriba cuando la caja está pensada para ser vista, si está encima de la mesa o un mueble cercano al escritorio mejor que mejor, puesto que ponerla en el suelo provoca que el usuario se pierda el encanto de tener una semitorre casi en su totalidad vista interiormente.
Al poner las conexiones y el panel de control arriba, dificulta al usuario su acceso si está sentado. Incluso este panel podría ir debajo de la cara frontal. Pero todavía ningún fabricante se ha atrevido a hacer tal cosa. Muchísimos usuarios ponen su PC, y más semitorres de este estilo, siempre encima de la mesa, precisamente porque están diseñados y pensados para ser ampliamente vistos. Así que, el usuario tendrá que ingeniárselas para ver dónde colocar esta semitorre de lujo para aprovecharse de todo lo que ofrece, tanto como caja en sí como estéticamente.
Este panel de conexiones y control delantero forma parte de un cuerpo de plástico ABS, atornillado al chasis y pegado a la lámina de vidrio templado frontal. Otro cuerpo con la misma forma y material está situado y montado igual en la parte inferior, de modo que el frontal está separado del chasis generosamente, se podría pasar la mano entre esta separación. Esto ayudará a limpiar mejor dicho frontal por el reverso. Si es necesario, este frontal se podría desmontar (tornillos), aunque no está facilitado para ello.
Detrás del panel frontal de vidrio templado se sitúa el primer filtro antipolvo, hecho con un marco mallado de plástico ABS con varios puntos imantados en su perímetro. Se puede extraer fácilmente por ambos laterales. Desde dentro de la semitorre se tiene acceso a 4 tornillos de rosca gruesa para desmontar la bandeja para ventiladores frontal, de modo que es posible desconectar los ventiladores que estén montados delante y sacar toda la bandeja.
Algo parecido ocurre en el lomo, cuya lámina de aluminio está atornillada al chasis y no está facilitado para desmontarla. Debajo de ella está otro filtro antipolvo similar al del frontal, mucho más «pegado» a la lámina superior de aluminio y que también se puede extraer por ambos laterales. De igual modo, debajo se sitúa otra bandeja para ventiladores, con 4 tornillos más de cabeza gruesa para poder desarmarlo.
Desmontar las bandejas para ventiladores superior y frontal puede resultar una tarea un tanto complicada si el usuario ya tiene todo el hardware montado, puesto que éste puede estorbar al acceso a los tornillos de dichas bandejas. Es necesario dejar estos tornillos con un apriete leve para poderlos desenroscar con los dedos sin demasiada dificultad. Meter un destornillador sería complicado en algunos casos.
Respecto a las tapas laterales de vidrio templado, obviamente son la parte más grande y delicada de todo el chasis. A pesar de ser de vidrio templado cuesta imaginarse romperlo, puesto que es bastante resistente. Solo se rompería con un golpe seco y muy fuerte, o con un objeto punzante metálico pesado o alguna caída accidental al suelo. Esto es importante conocerlo puesto que el medio de unión es un punto imantado superior delantero y dos bisagras traseras. El imán, supuestamente de neodimio, ejerce bastante atracción al metal del chasis, así que es relativamente difícil que alguna de las tapas laterales se abra por su propio peso en un traslado de la semitorre de un punto a otro del hogar. Lo mejor es asegurarse de que no se abran por accidente. Podría pasar puesto que no traen un cierre fijado delantero, detalle que tal vez algún usuario eche de menos.
Sin embargo, es imposible desencajar las bisagras traseras si no se retira el tornillo superior de la bisagra superior con un destornillador. Las bisagras son resistentes y duraderas, permitiendo casi un giro de abatimiento de 170º para ambas tapas laterales. Como el chasis es pesado, y más si está equipado con el hardware de turno, será imposible que vuelque por el propio peso del vidrio templado de cualquier de las tapas laterales abiertas, que es bastante considerable. Con un poco de cuidado con estas tapas deberían durar muchísimo.
Para la instalación de componentes, es aconsejable retirar las tapas laterales de vidrio templado, siempre sin desprender el plástico protector, operación que haríamos al finalizar todo el montaje. De este modo evitaremos rayar por accidente ninguna superficie. Para eso es necesario quitar los sendos tornillos superiores de las bisagras traseras superiores, y levantar las tapas con cuidado.
Antes de examinar el interior, hace falta señalar que el pasador de las dos bisagras de cada puerta es de diferente longitud, el de arriba es ligeramente más largo. De este modo facilita enormemente el montaje de las tapas, pasando los orificios de las bisagras por los pasadores mucho más rápido. Estos detalles pasan desapercibidos, pero alguien ha estado detrás realizándolos.
La bandeja para placas base está ajustada para formatos ATX como máximo, pudiendo montar Micro-ATX o Mini-ITX. Es probable que se pueda montar el formato E-ATX apurando encima de los orificios de paso derechos para los cableados. Pero es un formato que no recomendamos. Lo mejor es equipar una placa base ATX y que tenga al menos 5 conectores SATA o mejor algún M2 para los dispositivos de almacenamiento de datos.
Al ver el interior por la izquierda lo primero que llama la atención es el hueco delantero inferior, donde se han colocado el controlador Commander Pro, adherido al chasis por debajo, al igual que el nodo, colocado en la cara delantera del compartimento para la fuente de alimentación, de modo que ese hueco inferior delantero no se queda huérfano. Esto implica tener una gran cantidad de cables en esa zona, algo que estéticamente no queda muy bonito. Lo normal es colocar estos conectores de cables por el lateral derecho.
Lo que ocurre es que dicho lateral derecho está todo aprovechado para colocar ahí tan solo 2 bandejas para 3.5″ y no 2 sino 3 bandejas para 2.5″. Esto provoca que el usuario deba pensar bien qué unidades de almacenamiento de datos va a instalar, puesto que no podrá instalar más de 2 unidades HDD.
Si es una adquisición nueva, es posible optar por 2 unidades HDD de 2, 3, o 4 TB cada uno, si se requiere mucho almacenamiento. Si es para una actualización de un PC más viejo, probablemente 2 bandejas de 3.5″ sean demasiado poco. Es común hoy en día que los usuarios entusiastas tengan más de 2 discos duros de diferentes capacidades. Así que este es un tema importante.
Todos estos discos duros o unidades SSD van colocados en vertical, y tocará ser muy finos a la hora de pasar los cableados. Esta semitorre viene equipada con un embellecedor troncal atornillado justo en el lado derecho de las bandejas de 3.5″, de modo que con un poco de paciencia se pueden esconder bien muchos cables. Las bandejas de 3.5″ son de plástico ABS, con 4 arandelas de goma antivibración para montar los discos duros sin tornillería. También aceptan el formato de 2.5″ usando tornillería, de modo que se podrían instalar hasta 5 unidades de 2.5″, sacrificando las 2 de 3.5″.
La única pega que hemos visto de todo este diseño es que las unidades de almacenamiento de datos están muy aisladas en el lateral derecho sin ningún sistema de ventilación activa. El diseño empleado evita que el calor se acumule por la holgura de unos 3 mm existente entre la tapa lateral derecha y el chasis, al igual que la tapa lateral izquierda. Esto lo que provoca es que el chasis esté «semiabierto», más propenso al traspaso del ruido. Los 3 ventiladores LL120 RGB que Corsair son de 12cm, que necesitan más RPM para provocar mayor caudal, provocando un ruido mayor que en otros sistemas.
Por suerte, el Commander Pro facilita la regulación de las RPM de los ventiladores, dejando toda la circuitería de la iluminación RGB por separado para un control individual. Todos estos detalles hay que tenerlos presentes a la hora de montar todo el hardware. Quizá convenga instalar 4 ventiladores de 140 mm (2 arriba y 2 delante) y otro trasero de 120 mm, o dependerá de si se instala un RL de doble o triple ventilador. La Obsidian 500D RGB SE se asegura de tener el espacio suficiente para los RL de tamaños más típicos.
Otra posible opción de montaje es prescindir de las 2 bandejas para discos duros, instalar solos unidades SSD y colocar el Commander Pro y el nodo donde van colocadas dichas bandejas. Por supuesto, dependerá de los deseos de cada usuario. Junto con el manual hay dos pegatinas 3M de doble cara adhesiva para poder hacerlo, de modo que este modelo de semitorre ofrece cierta flexibilidad a la hora de montar los componentes.
Sobra mencionar las distancias aceptadas de los componentes típicos (altura del disipador para CPU, longitud para tarjeta gráfica, profundidad de la fuente). La fuente se puede girar 180º, y el compartimento superior viene microperforado para el paso de aire. Además, las 7 ranuras PCIe horizontales vienen acompañadas de dos más verticales para montar ahí una tarjeta gráfica de doble ranura con un cable adaptador PCIe x16 (no incluido).
El montaje de la tarjeta gráfica en esta ubicación no queda tan firme como si fuese directamente conectado en la ranura PCIe x16 pertinente, pero es otra posibilidad más. Para montarla, el acceso está por la parte trasera exterior, extrayendo un embellecedor superior retirando un tornillo de cabeza gruesa.
El controlador Commander Pro y el nodo RGB ya vimos su funcionamiento con el software iCUE en otro análisis, y ya los hemos vuelto a ver equipados en otras cajas de la marca, así como la iluminación RGB de los ventiladores LL de Corsair. Corsair se curra bastante estas cosas para que el usuario entusiasta se pueda ampliar de una forma coherente (con el mismo estilo) parte de su hardware. Por eso comercializa las tiras LED Lighting Node Pro (que también traen un nodo de doble puerto RGB) y el pack de 3 ventiladores LL120 RGB de Corsair.
Si el usuario quiere ampliar este chasis con estos packs o kits de iluminación y ventilación tocará echar mano a la calculadora. La Obsidian 500D RGB SE ronda los 280€, el pack de 3 ventiladores LL120 RGB ronda los 95€ (así tendría 6 ventiladores iguales de 120mm, la máxima capacidad de la semitorre) y el pack de 4 tiras LED Lighting Node Pro RGB ronda los 55€ (y que veremos en otro análisis pronto). Esto son unos 430€ todo el equipamiento. De este modo todo iría conectado al famoso software unificador iCUE de Corsair, que ya tanto hemos visto en otros de nuestros análisis.
Para completar el equipo y aprovechando este software, es aconsejable que los entusiastas que se equipen de todos estos componentes confíen en periféricos de Corsair (teclados, ratones, auriculares…). Todo funcionará con iCUE, un solo programa para todo, obteniendo así la mejor experiencia. iCUE es un software en continuo desarrollo, recibiendo constantemente actualizaciones. Actualmente va ya por la versión 3.16.56. Es decir, no es un software abandonado, como sí ocurre con otro hardware más barato de otros fabricantes que solo lanzan una primera versión de su software de control y ahí se queda. De este modo se evita tener varios programas de diferentes marcas cargados en el sistema operativo.
La Obsidian 500D RGB edición especial de Corsair es una semitorre de gama alta como pocas hay en el mercado, un lujo un tanto condicionado a la ampliación. Si buscas una semitorre para tu mejor hardware, solo tendrás que tener presente la ampliación de ventiladores, la capacidad de almacenamiento de datos que requieras, porque solo permite 2 unidades de 3.5″ y las unidades SSD de mayor capacidad siguen teniendo un precio muy alto y, por último, dónde vas a colocarla, porque está hecha para ser vista, no para «esconderla» en el suelo o «semiempotrarla» en un mueble.

















