4. Componente principal. Pruebas de montaje y de audio
Empezando por delante, la M25-W tiene acceso directo al panel de conexiones y control frontal. Los botones de encender/apagar y reinicio están en los extremos, siendo bastante grande y fácil de localizar el primero. Sin embargo, el botón de reinicio no se puede accionar con el dedo, sino que es necesario un alfiler o un palillo para poder alcanzarlo. Esto es un tanto incómodo e innecesario, a no ser que el usuario tenga algún hijo pequeño trasteando, que puede ocurrir. En este caso, es posible configurar en la BIOS de la placa base que el botón de encender/apagar solo actúe manteniendo pulsado el botón más de 4 segundos. Así que, para estos casos, podréis evitaros ciertos sustos.
Este panel dispone de 2 puertos USB 3.0, tal como es preferible, olvidándose de los obsoletos puertos 2.0 y trae los dos conectores tipo jack coloreados, verde para la salida de audio (auriculares) y rosa para la entrada (micrófono), fácil de identificar. Como peculiaridad, el botón de encendido/apagado trae un «logo de encendido» iluminado con un led interno que queda muy bien y otro circular más pequeño a la izquierda para el estado de lectura/escritura de las unidades de almacenamiento de datos. Nos gusta esta clase de paneles por su distribución y acceso.
Esta semitorre se puede colocar encima de la mesa y si el usuario está sentado, tendrá un buen acceso a él, algo que no ocurre con los paneles colocados arriba en la parte delantera, que obligan al usuario a levantarse para usarlos. Actualmente hay muchas cajas con las carátulas frontales de vidrio templado o totalmente tapadas con ABS cuyo panel está arriba.
La parte trasera encierra un sistema de anclaje íntegro con una chapa en forma de L con dos tornillos de fijación de rosca gruesa. Desroscándolos manualmente se pueden montar las tarjetas PCI/PCIe roscando los tornillos por detrás, por fuera de la caja. No nos gustan demasiado este tipo de sistemas, pero al menos tenemos tornillos en cada ranura, que son lo mínimo para que nuestras tarjetas queden bien firmes al montar.
Como peculiaridad, solo trae una chapita PCI/PCIe en «L» premontada, y otra en la cajita de accesorios. El resto de chapitas se retiran por doblaje y no son reutilizables. Hay un total de 7 ranuras.
El lateral derecho presenta un ventanal integral, que incluso deja descubierto el compartimento inferior interno. Tiene un aspecto algo ahumado, que difumina un poco la imagen que hay en el interior. Está muy chulo. Es rectangular, sencillo, plano, sin formas raras, sin complicaciones para fabricarlo.
Al abrir las dos tapas laterales veréis que es bastante espaciosa por dentro, destacando el compartimento inferior completo, que cubre toda la profundidad de la semitorre y la libertad de espacio en la zona delantera interior, salvo en la zona más alta, que incluye una doble bahía de 5.25″ desmontable, equipada con dos anclajes laterales para no usar tornillos, con orificios adicionales en caso de querer emplear tornillería.
Este encajonado doble viene fijado y montado con tornillos. Se puede desmontar retirando la carátula frontal y la tapa lateral derecha de la semitorre empleando un destornillador, dejando todo el vertical del frontal interior totalmente libre.
El lateral derecho es totalmente de chapa de acero. Pero, esta caja dispone de holgura suficiente para pasar por detrás de la bandeja negra de la placa base los cableados más gruesos (como el cableado de 24 cables para la alimentación de la placa base). Además, incluye orificios de paso para pasar cables por encima de la placa base. Así que la gestión del cableado no es ningún problema. También dispone de diferentes aros de atado, ofreciendo la posibilidad de hacer montajes muy aseados, con el cableado bien ordenado.
Centrando la atención en las zonas habilitadas para incluir ventiladores, la parte superior permite 3 ventiladores de 120mm o bien 2 de 140mm. En este segundo caso, será necesario retirar la doble bahía frontal, para dar cabida a esos 140mm de ancho. Esto está bien porque permite cierto juego según la necesidad del usuario. La parte trasera viene equipada con un ventilador de serie de 120mm con 4 LEDs azules muy potentes. Puesto que la caja es blanca, la iluminación interior es bastante intensa a pesar de emplear un solo ventilador. La zona delantera trae 2 ventiladores más negros de 120mm, pudiendo sustituirlos por 2 de 140mm.
Estos ventiladores son bastante silenciosos a máxima potencia pero con un caudal mínimo correcto para renovar el aire, tal como hemos podido probar. Traen un conector macho/hembra de 4 contactos para la fuente y otro de 3 contactos (3 cables, con detector RPM) para conectarlos la placa base, de modo que no son ventiladores cutres. En total, la caja puede equipar 3+2+1 ventiladores de 120mm o bien 4 de 140mm y 1 de 120mm. No está nada mal.
Si nos fijáis en las zonas frontal y superior para ventiladores veréis que no hay orificios circulares para pasar tornillos, sino que son ejes longitudinales para pasar y poder correr los tornillos. Así es posible cambiar la posición de los ventiladores, hacia delante o hacia atrás en el lomo, o hacia arriba o hacia abajo en la zona delantera. Para los radiadores de refrigeración líquida, podemos aprovechar cualquiera de las 3 zonas para colocar formatos de 120 o 240mm. En caso de usar uno, Hardaily Labs recomienda uno de 240mm colocado en el lomo. El compartimento inferior para la fuente trae un orificio delantero suficientemente grande para un radiador + ventilador.
Respecto a las unidades de almacenamiento de datos, Sharkoon ha habilitado en el lateral derecho 2 bandejas negras para 2.5″, fijadas en un cuádruple eje y con un tornillo cada una. Estas dos bandejas se pueden retirar y montar encima del compartimento inferior. Lástima que no sean 4 bandejas en lugar de 2.
Por otro lado, Incluye un compartimento de 2 raíles con dos bandejas de plástico para unidades de 3.5″/2.5″. Así que es posible montar 2 discos duros sin usar tornillos y 2 SSDs de 2.5″, o bien 4 unidades SSD de 2.5″, por ejemplo. Respecto al hueco de la fuente, queda algo justo, con esos 205mm de profundidad disponibles. Lo mejor en este caso es optar por una fuente no modular, usar los cableados que toca, esconder los no usados y olvidarse de maniobrar con conectores modulares.
Respecto a la placa base, es compatible con formatos Mini-ITX, Micro-ATX, o ATX, siendo esta última la más recomendable para aprovechar todas las ranuras PCI/PCIe. La bandeja ya trae montados hasta 8 tornillos de los 9 posibles para la placa base y un gran ventanal abierto para acceder al socket por detrás de la placa base. Al lado derecho de esta bandeja hay una zona de paso bastante amplia para conectar ahí los cables sata y pasar otros cableados. Así que, aunque el espacio está algo justo para una placa base ATX, está bien pensado. Hemos probado a montar o encajar algunos componentes, placa base, algún disco duro y SSD y una tarjeta gráfica, además de una fuente.
El montaje es sencillo y sin ningún problema, salvo lo justa que quedará la fuente. También podéis tener problemas a la hora de montar una unidad de 3.5″ en la tapa adaptador de 5.25″ a 3.5″, como puede ser un rehobus o controlador de ventiladores, puesto que no tendrá un apoyo más allá de la propia tapa adaptador (esta solo trae un orificio para un tornillo en ambos lados). Esto ya son detalles que el usuario tendrá que mirar bien.
Los cableados adjuntos son todos negros y con longitud más que suficiente. Además, el cableado con el conector de HD Audio, que incluye una ramificación con el controlador de audio y conector amarillo USB 2.0 interno. En Hardaily Labs hemos probado este controlador de audio bajo Windows 10 con una placa base reciente de GIGABYTE. Recordad que solo se debe conectar el conector amarillo USB, en caso de querer usarlo.
Primero es necesario descargar el paquete de software disponible en la web oficial de Sharkoon (version 1.1.16.7). Este paquete pesa más de 70MB, está en el idioma español (entre otros idiomas) y una vez instalado os aparecerá un icono en la bandeja derecha de la barra de tareas.
Este icono nos dará acceso al panel de control de audio del controlador SHARKOON 7.1 SOUND EXTENSION. Este panel tiene hasta 4 pestañas inferiores con los siguientes controles:
- EC: Ecualizador de 5 bandas, con un rango de +12dB y -12dB.
- Efecto: para efectos en la salida de audio: ninguno, cine, baño, sala y pasillo.
- Mic: con una barra deslizante de ganancia para la entrada del micrófono y opción de silencio.
- Virtual 7.1: con capacidad de manipular el estado de la sala en 9 puntos.
Es posible guardar o cargar perfiles también en el disco duro. Para ser un programa adjunto en una semitorre económica que vale menos de 60€ no está nada mal, además de estar traducido en múltiples idiomas. Hemos probado la calidad de audio y es más que decente (en Windows a 16 bit, 48.000 Hz). No se notan sonidos de fondo extraños ni siseos ni nada parecido.
El audio es bueno, tanto en la salida como en la entrada. Los efectos de audio son un tanto exagerados y el sonido virtual 7.1 genera un ambiente algo más espacioso en la escucha estéreo pero nada espectacular. Resulta una solución sencilla. Sharkoon se curra estas cosas y la verdad es que ha sido una sorpresa que se incluya este extra de audio en una caja como ésta. Para ciertos casos podrá venir genial disponer de este controlador de audio frontal, sobre todo si no disponéis de audio integrado en la placa base.
En resumen, estamos frente a una semitorre detallista con diseño sencillo y estilo sobrio a un precio muy competitivo, equipando un extra de audio prácticamente único en el mercado que no parece haber encarecido para nada al producto en todo su conjunto. Por unos 55€ la tenéis en las tiendas especializadas disponible en 2 opciones de color, negra o blanca con toques negros.
Sharkoon no para de demostrar que es una muy buena marca en la gama media y baja de cajas para PC, una marca muy competitiva que piensa bien en sus productos. Si os gusta los estilos de cajas que ofrece esta marca, tenedla en cuenta, no os defraudará.

















